Me he lesionado y ahora qué?
3er post del artículo “Las lesiones y la bailarina”. Fase dura, aparentemente tremendista, pero la realidad de cómo nos sentimos en ocasiones es tal cual, y afrontarla con toda su crudeza, es necesaria. A tenor de lo que pueda parecer, los que me conocen, saben que soy una persona vital, fuerte y alegre, de ahí que mi intención es, meramente, transmitir el mensaje de que no hay por que sentirse mal si por momentos tiras la toalla, es parte del proceso, es humano, no te sientas culpable por sentirte así. Grita, llora, no te reprimas, no tengas miedo a la oscuridad, hazle frente, y poco a poco desaparecerá.
TERCERA FASE, LA “ANSIEDAD”
5ª semana de inmovilización con férula, “vamos a ponerte la bota walker”, dios! sientes una alegría enorme, como si te hubiera tocado la lotería! puedo andar! puedo ponerme de pie! sientes como la “maquinaria” de supervivencia mental funciona de forma desmesurada, llevándote a un estado de optimismo exacerbado, que por desgracia, dista de la realidad, pero tú no eres consciente, solo quieres abrazar la euforia del momento, puedo ponerme de pie! ya mismo estoy de vuelta….
STOP, es un avance, pero no lo que esperabas, y cuando se esfuma el estado de “máxima euforia”, reparas en la respuesta del traumatólogo, a tu pregunta (con cara de máxima esperanza e inocencia) cuándo puedo volver a bailar? silencio… y vuelve la incertidumbre, el miedo, no hay cabida para la ira, ya pasó, pero entra en juego la ansiedad.
Cuando padeces ansiedad, un granito de arena se convierte en una roca grande y negra, te encuentras desnuda, desvalida, y se complica afrontar el día a día. el 10 de febrero se fue mi amiga, mi niña, mi gata Gelina dando gracias por esos casi 16 años de amor, cómo gestionar su pérdida? cómo no sentir dolor? y se fue, la lloré sin poder refugiarme en los brazos de mi madre (porque ella vive sin vivir) y al poco tiempo, afronté el terrible diagnostico de mi perro Idefix, (al día de hoy seguimos luchando juntos) y de nuevo las voces, ¿por qué a mí? ¿qué más me puede pasar?
Y llega la infamia, la crueldad, la injusticia, el sin sentido de una invasión (una vez más) Ucrania, Siria, …..dolor más dolor…
Te notas cansada, harta, confinada en la cárcel de tu casa, sin ver a nadie, sin poder trabajar, sin poder bailar, reír, sin poder ayudar a nadie, te sientes una verdadera inútil… y le das vuelta a la cabeza ¿puedo solucionar algo?sin llegar a ninguna conclusión, te sientes apartada, no tienes ánimos para publicar en redes sociales, no puedes concentrarte en leer, te aíslas, lloras, gritas, y luchas con todas tus fuerzas para no resbalar y caer en el pozo…
Los ataques de pánico, se suceden, y en momentos puntuales, pides que todo se acabe, pero sigues luchando, por tí, por tu familia, por mis mejores amigos, mis “peludos” (aun me quedan 5), así que remontas de a poco, ordenando un poco tu casa, pero con miedo ” y si me estoy pasando y la fractura no mejora” y vuelves al sofá, el maldito sofá que te atrapa y vuelves a coger la tablet con ese juego estúpido, porque tu mente necesita no pensar, porque tu pie necesita descansar, acudiendo a tu cabeza los consejos “lee, lucha, descansa, todo pasará, no seas negativa que es peor” y ves como careces de fuerza alguna para nada, impotencia, bucle, SOLA.
Y tú? que opinas?